Uno de los factores que rodean al entrenamiento del deportista es una adecuada nutrición. Es fundamental para el rendimiento y para la recuperación tener una adecuada alimentación relacionada con la intensidad, el volumen e incluso la especialidad deportiva hacia la que va dedicada el entrenamiento.
Nuestra colega Anna Grifols nos detalla a continuación la energía que necesitamos para el entrenamiento.
Según Anna, la dieta de un deportista que entrena con regularidad debe proporcionar la energía suficiente para optimizar su rendimiento. ¿QUIERES SABER MÁS?
Sus necesidades calóricas variarán según el tiempo que dure el entrenamiento y la intensidad a la que lo realice.
Así, un deportista que entrene 30-40 minutos al día, 3-4 días a la semana a intensidad media-baja, obtendrá la energía que necesita con una dieta equilibrada de 1800-2400kcal/día o en función a su peso de 25-35kcal/kg de peso al día, ya que su gasto calórico será de 200-400kcal/hora de ejercicio.
En cambio, si entrenase 2-3 horas al día durante 5-6 días a la semana a intensidad media-alta su gasto energético seria de 600-1200kcal/hora y su dieta debería aportar de 50-80kcal/kg de peso/día.
Estas necesidades se ven más incrementadas en determinados momentos y tipos de deportes, por ejemplo durante una vuelta ciclista por etapas el gasto energético diario puede llegar a superar las 10.000kcal.
En estas circunstancias, es muy difícil adecuar un menú que cubra estas necesidades, tanto porque le será muy complicada su ingesta debido a la gran cantidad de alimentos que deberían consumir, como por la imposibilidad de hacerlo durante las horas de duración de la etapa.
Lo peligroso seria que no cubriese este gasto energético durante un periodo relativamente largo de tiempo, ya que además de perjudicar su rendimiento le provocaría pérdidas de peso (masa muscular principalmente), problemas del sistema inmunológico, mareos, hipoglucémia,…
En estos casos es necesario complementar la dieta con suplementos alimenticios que nos proporcionen mucha energía en poco volumen de alimento siendo además de fácil digestión: barritas, geles, bebidas iso e hipertónicas, frutas liofilizadas, mermeladas, suplementos hipercalóricos,… siempre regulado y revisado por personal cualificado.
La población más susceptible a necesitar este tipo de suplementación energética son los ciclistas, corredores de a pie, nadadores de mar abierto, triatletas, ultrafondistas,…