Una de las nuevas formas de entrenamiento está llamando a la puerta de los entrenadores personales y de los deportistas de cualquier modalidad deportiva. Se llama entrenamiento concurrente. Este entrenamiento llamado concurrente consiste en mezclar entrenamientos de predominancia de más de una cualidad física. Es decir, estaríamos hablando de entreno de Fuerza y de Resistencia, o de Resistencia y Velocidad, o velocidad y amplitud de movimiento…
En el caso en el que nos encontramos vamos a hablar del entrenamiento que combina la resistencia con la fuerza.
Sabemos que la respuesta del organismo es diferente según el trabajo que hacemos. Pues imaginaros si lo que queremos es hacer un entrenamiento de fuerza con sus respuestas adaptativas y un entrenamiento de resistencia con sus respuestas en el efecto del entrenamiento. ¿QUÉ ES MEJOR?
La Ciencia del Deporte nos dará las respuestas que buscamos. En este caso, podemos decir que tenemos una serie de consejos que nos vendrán bien para aplicar a nuestros entrenamientos y a nuestras planificaciones de los entrenamientos.
Si hacemos un entrenamiento de fuerza por la mañana (a la que yo añadiría fuerza funcional por su especificidad a tu deporte) nos dice Wojtaszewski et al. (2000) que podemos realizar una sesión de resistencia a las 3h siempre y cuando no sea intensa. Por otro lado, según Baar y Esser (1999) nos hablan de un reposo de 18h para el entrenamiento de resistencia intenso.
McBride et al. (2009) nos recomienda una reposición de hidratos de carbono total entre entrenamientos. Estaríamos hablando de una bebida de recuperación (Recovery). Además nos habla de sesiones de mañana y de tarde. Generalmente la fuerza se trabajará por la mañana y la resistencia por la tarde. Pero en nuestra opinión dependerá de la importancia que tenga el entrenamiento que hagamos. Es decir, nosotros os recomendamos que el entrenamiento por la mañana sea al que más importancia vais a darle. Por ejemplo, si queremos darle prioridad a un entrenamiento de intervalos de subida en carrera, la haremos por la mañana y por la tarde realizaremos la sesión de fuerza.
En relación al momento de la temporada Mettler et al. (2010) nos advierte que según el nivel de entrenamiento no es posible rellenar los depósitos de energía de manera total. Así que debemos tenerlo en cuenta para el diseño de entrenamiento. Tamién nos advierte que combinar este tipo de entrenamientos consume masa muscular. Por lo que el control de la composición corporal del deportista será fundamental para conservar el rendimiento.
Si seguimos todos estos consejos podemos incorporar en nuestra rutina de trabajo entrenamientos concurrentes que nos faciliten el desarrollo de dos cualidades física y nos maximice el rendimiento.