Un estudio realizado por Brophy-Williams de la School of Sport Science, Exercise and Health, the University of Western Australia, demuestra que la inmersión en agua fría después del entrenamiento de alta intensidad produce mejoras en la recuperación del deportista.
Se ha medido dicha recuperación mediante la inmersión inmediata (nada más terminar el entrenamiento) y a las tres horas tras la finalización del mismo. En ambos casos la recuperación ha sido superior. No obstante la inmersión inmediata es todavía más efectiva.
Desde SR Sport & Training recomendamos la imnersión inmediata tras el entrenamiento (en la hora siguiente) y si no es posible no exceder las tres horas tras finalizar la práctica deportiva.